Además de días y horarios, ¿qué más necesitás saber?

¿No está todo ya muy planificado, estructurado y predecible?

Quizás eso es lo que tiene que cambiar, pero difícil ir tan contracorriente como para desligarse 100% de una agenda organizada. No vivimos en una isla desierta después de todo, ni es la idea.

¿Un gran comienzo? Liberar una pequeña parte de tu agenda para que en ese lapso de tiempo te permitas salir de la estructura. Que te pregunten qué vas a hacer y decir con orgullo: no tengo idea.

Nos viven diciendo que salgamos de la zona de confort. Si de todo lo que estás haciendo en la vida esperás un resultado concreto, si ya lo tenés todo calculado, puede que te esté faltando un espacio para que sucedan cosas fuera de tus propios parámetros. Nunca vas a salir de tu zona de confort si no te animas a dejar algo librado al azar.

¿Cómo se hace? Esa es la parte en que te decimos: No te preocupes, de eso nos encargamos nosotros.

Vos solo tenés que bloquear una partecita de tu agenda, y desbloquear tu mente.